Esta receta es muy sencilla y está buenísima, especialmente para los quesoadictos como yo.
Ingredientes para 4 personas:
300 gr. de queso fresco tipo burgos, 300 gr. de jamón york, 5 huevos, 3 cucharadas de harina, 2 cucharadas de levadura en polvo, 250 ml. de leche, 1 cucharada de mostaza, 2 cucharaditas de sal, un poco de pan rallado y de margarina o aceite y tomate frito casero.
Elaboración:
Primero se calienta el horno a 180º y se pone un huevo a cocer. Luego se trocea el queso fresco y el jamón se corta a taquitos pequeños.
Por otra parte, se mezclan en la batidora 4 huevos, la harina, la levadura, la leche, la mostaza y la sal.
En un recipiente se ponen el queso y el jamón y se le añade la mezcla anterior.
En otro recipiente más bien alto, se unta un poco de mantequilla o de aceite y se le espolvorea pan rallado.
A continuación, se le agrega toda la mezcla y se mete el horno.
Se deja en el horno unos 45 minutos y después se le sube de temperatura a 200º unos 15 minutos. Ya sabéis que los tiempos de los hornos son orientativos, no quiero que se os peguen las comidas por mi culpa. La prueba infalible es la brocheta, metéis una en la tarrina, y si sale limpia es que está hecha.
Por último la decoráis con el huevo cocido y con perejil y lo servís con tomate frito. Ummm, estaba realmente deliciosa.
Esta receta la encontré en una caja de levadura Royal y es original de Olga Barba Ortiz, a quien felicito porque en casa nos encantó.
Esta receta la encontraréis también en PLATOS ÚNICOS
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